En 1986 se abrían las dos primeras tiendas de Comercio Justo en nuestro país, en Donostia-San Sebastián.
Desde aquellas dos primeras tiendas, hoy en el sector trabajan unas 125 personas y más de 2000 colaboran como voluntarias.
Es interesante recordar que antes de la apertura de las dos primeras tiendas en nuestro país, ya desde los años 70 se venían desarrollando experiencias cercanas al Comercio Justo. Se trataba de iniciativas de comercio directo con grupos de artesanos de América Latina o Asia.
Tanto las dos tiendas como estas experiencias previas surgen de grupos de personas y organizaciones que conocen el trato injusto que reciben los agricultores-as o artesanos-as de América Latina, África o Asia, y las duras condiciones de trabajo que soportan a la hora de producir artículos que en muchos casos se venden en lo que se denominaba Primer Mundo. En esos años más de 3000 millones de personas vivían en la pobreza, según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). De estas preocupaciones y el compromiso con las comunidades más desfavorecidas surgen las iniciativas que darían comienzo al movimiento del Comercio Justo en nuestro país.
Más adelante, especialmente en los años 90 se fueron constituyendo gran parte de las actuales organizaciones de Comercio Justo. En el 95, por ejemplo, Alternativa 3 inaugura la primera (y única hasta el momento) tostadora de café dedicada en exclusiva al Comercio Justo.
Crecimiento de las ventas
La década de los 90 fue la de la expansión del Comercio Justo en nuestro país. A lo largo de esos años se fueron abriendo tiendas por todo el territorio.
También en esta década, aquellos primeros mercadillos y tiendas de artesanía se transforman en iniciativas de Comercio Justo propiamente dichas. Este desarrollo motivó la realización del primer análisis de ventas, en el año 2000. En ese momento la facturación por productos de Comercio Justo apenas llegaba a los 7 millones de euros. Casi el 70% de las compras se realizaba en las tiendas de Comercio Justo y más de la mitad correspondía a artículos de artesanía.
En la actualidad, con 140 tiendas y puntos de venta de Comercio Justo, gestionados por las organizaciones integradas en la CECJ, y estos productos cada vez más presentes en distintos establecimientos, las ventas de Comercio Justo han ascendido a 33,2 millones de euros en nuestro país en 2014.
Pese al crecimiento global, es importante recordar que la crisis económica ha frenado las ventas en las tiendas de Comercio Justo que ahora representan un 17% del sector.
Las campañas de sensibilización y denuncia
Paralelamente al desarrollo de las tiendas, y en especial durante los años 90 y 2000 las organizaciones realizan una importantísima labor de sensibilización y difusión del Comercio Justo.
Por un lado, se desarrollan campañas y acciones en centros educativos dirigidos a estudiantes de todos los niveles (desde Primaria a Universidad), un público que se considera esencial para promover en ellos una conciencia de un consumo más responsable y solidario. De esta manera se sientan las bases para ir conformando una sociedad que apueste por un modelo de consumo más justo y sostenible que contribuya a crear un mundo menos desigual.
«Además existen 830 millones de trabajadores empobrecidos, es decir, que viven con menos de 2 dólares al día, y 1500 millones de personas no cuentan con unas condiciones de trabajo dignas y seguras. El trabajo infantil afecta a 168 millones de niñxs, la mitad realizan trabajos peligrosos»
Es trabajo diario y constante de todxs evitar las injusticias.