El Movimiento por el Comercio Justo hace un llamado a las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático CMNUCC para que actúen de acuerdo con sus compromisos bajo el Acuerdo de París y den prioridad a las prácticas comerciales justas en las cadenas de suministro globales que resultan indispensables para la justicia climática.
La crisis climática es injusta: su impacto lo sienten con mayor severidad quienes menos responsabilidad tienen en ella. Las pequeñas organizaciones agrícolas del Sur global y agricultores/as a pequeña escala (‘Global South’) están sufriendo los efectos del cambio climático: sequías e inundaciones, patrones cambiantes de maduración y cosecha, nuevas plagas, malezas y enfermedades relacionadas con el clima y cosechas reducidas.
Con la pandemia del COVID-19 ocurre lo mismo: los sectores más marginados son los más afectados porque la propagación de la infección y/o las medidas de bloqueo tienen un impacto negativo en su trabajo y en el comercio.