Piña rellena de arroz y anacardos

piña

Recomendamos utilizar en su elaboración todos los productos que podamos de Comercio justo y ecológico, para asegurarnos de que los alimentos que entran en nuestra cocina, no sólo son saludables, para nosotros mismos, sino que también han sido elaborados bajo condiciones dignas por sus productorxs.

  • 1 piña grande
  • 250 gr de arroz jazmín, hervido y caliente
  • 3 cucharadas de aceite
  • 1 cucharada de salsa de soja
  • 1 huevo, batido
  • 1 cebolla mediana, cortada a tiras finas
  • 100 gr de anacardos
  • 1 bote pequeño de guisantes cocidos
  • 1 chile rojo fresco, cortado a rodajas finas
  • 1 cucharada de cilantro , picado
  • Sal no química.
  • Zanahoria y hierbabuena para adornar
  1. Corta por la mitad longitudinalmente la piña y separa toda  de pulpa, dejando intacta la piel para poder rellenarla más tarde. Corta la fruta a trozos procurando no perder nada de su jugo.
  2. Calienta aceite en un wok y echa el huevo batido de modo que cubra el fondo de la sartén o el wok, como si hicieras una tortilla redonda. Dale la vuelta y cuécela por el otro lado. Retírala del fuego y córtala a tiras finas.
  3. Sofríe a fuego vivo la cebolla unos 2-3 minutos hasta que esté dorada y tierna. Agrega la salsa de soja, los guisantes y el arroz y déjalos en el fuego 3 minutos. Ahora echa los trozos de piña y su jugo, los anacardos y las tiras de tortilla. Déjalo al fuego 2 minutos más, removiéndolo bien. Pon la sal.
  4. Rellena la piña vacía con la mezcla que has preparado, agrégale el chile y el cilantro. Sírvela en una fuente.

Os ofreceremos recetas del Mundo, con mezclas suaves, contrastes de sabores, olores y muchas texturas.

Llevaremos a cabo un pequeño-gran gesto solidario.

¿Te atreves a probar?

Nos cuentas

Los ingredientes en tiendas de: comercio justo y en tiendas ecológicas.

Consumidores de comercio justo

A nuestros embajadores del comercio justo

Nora Gormezano abre la puerta de una de nuestras tiendas de comercio justo todos los lunes, miércoles y jueves por la tarde. Lo hace de manera voluntaria, para explicar qué es el comercio justo y apoyar a las organizaciones que hay detrás de cada producto. Y, entre otros muchos motivos, por los productores de Silence, de la India. “Cuando alguien compra una vela de Silence, no puedo dejar de explicarle las características de este grupo de artesanos, todos ellos sordos o con algún tipo de minusvalía. Tengo un hermano con sordera y sé lo que significa ser sordo y sentir la necesidad de ser útil”, explica, y concluye: “Esta colaboración me ha aportado mucho Sencillamente, he aprendido”.

A los protagonistas del comercio justo

Durante estos años, hemos conocido a decenas de personas que se dedican a la artesanía y a la agricultura, que con sus manos han creado o hecho crecer productos que hemos ofrecido a la ciudadanía. Ellas son los rostros de esta cooperación a través del comercio justo que consigue cambiar vidas.

Alda Zaracho (Paraguay)

Productora de azúcar socia de la cooperativa Manduvirá, que proporciona a todos sus miembros productores servicios de financiación, atención médica y apoyo educativo. “Ahora, gracias al azúcar que producimos en la cooperativa, tenemos más ingresos y con ese dinero podemos hacer muchas cosas: invertir otra vez en la finca, comprar algunas cositas para la casa… Antes no había ese pequeño progreso. Además, hemos podido crear un centro de salud. Yo uso siempre el área de oftalmología, voy a menudo al oculista.”

Getta Devi (India)

2014-09-03 15.59.02 retocBordadora de cuero para Asha, asociación que promueve el bienestar social y económico de sus artesanos y artesanas y asegura salarios y condiciones de trabajo dignas. “Tengo una cuenta corriente en el banco y estoy contenta de tener independencia económica. Creo que, si hay trabajo en el bordado del cuero, habrá más mujeres que puedan ser independientes económicamente.”

Eliazar Banhagenie (Uganda)

Productor de café para la cooperativa Ankole Coffee Producers Cooperative Union (ACPCU), que trabaja en la mejora de la producción del café y de su comercialización para que los campesinos y campesinas puedan obtener mayores beneficios. “Cuando cumplí 50 años, me formé a través de la cooperativa en nuevos métodos de cultivo y participé en el uso de los métodos y tecnologías de cultivo que cambiaron mi vida. Antes de las formaciones, pasé por muchas dificultades, muchos problemas. Tras mejorar mi formación, escribí un libro, titulado 50 años desperdiciados. Ese es mi libro, la historia de 50 años desperdiciados hasta que conseguí los conocimientos y el apoyo para mejorar mi finca y la vida de mi familia.”

A los consumidores de comercio justo

Gracias a quienes nos habéis apoyado durante estos años mediante el consumo responsable a través del comercio justo. Ahora, gracias a vosotros, miles de pequeños productores y productoras pueden vivir dignamente de su trabajo.